Portada de una biografía fundamental. |
Miguel Fleta. El hombre y el mito.
Sergio Castillo y Alejandro
Martínez. Asociación Aragonesa de la Ópera Miguel Fleta. Zaragoza, 2019. 386
págs.
Aunque su carrera profesional,
comenzada en Trieste en 1919, no fue muy larga, Miguel Fleta (Albalate de
Cinca, Huesca, 1-12-1897– La Coruña, 29-5-1938) está considerado como uno de
los más grandes tenores de la historia. Fue un personaje que triunfó en los
grandes teatros europeos y norteamericanos, y cautivó con su arte al público de
las grandes ciudades españolas y extranjeras donde el arte delo canto era
especialmente admirado. Fu, además un hombre apasionado y que apasionó a sus
contemporáneos con una voz inigualable.
El presente volumen es una
completa biografía que se aborda en cinco apartados. El primero se dedica al
hombre y presenta su vida, comienzos, triunfos y ocaso. El segundo, “Miguel
Fleta, el mito” aborda la visión de los públicos y expertos, su popularidad y
la vida social que de ella se desprendía. El tercero, trata de su “proyecto
lírico” para España; básicamente crear el Teatro Lírico Nacional. El cuarto,
“Pensamiento e ideología”, aborda la relación del cantante con los regímenes
políticos que le tocó vivir: la monarquía constitucional de Alfonso XIII, un
Directorio militar, la república de Primo de Rivera y el comienzo de una Guerra
Civil. El quinto, se ocupa de su fallecimiento.
Un libro muy interesante y
documentado que pone a nuestro alcance la figura del hombre y del tenor. Un
trabajo abordado desde la objetividad y alejándose de otros modelos biográficos
más novelados y literarios.
Fleta fue un personaje
especialmente popular y entrañable, siempre dispuesto a cantar, incluso jotas
de su tierra, incluso después de haber interpretado una gran ópera y atendido a
sus muchísimos admiradores. El tenor oscense se dedicó prácticamente a la
ópera, pero también intervino en algunas representaciones de zarzuela Luisa Fernanda, La Dolorosa, Doña
Francisquira, La Dolores) y dejó grabados algunos atractivos fragmentos zarzueleros,
como las “granadinas” de Los emigrantes, la
“romanza de la flor” de Los gavilanes, la
célebre “jota” de El trust de los
tenorios, entre otros. Muchos de ellos están disponibles en la red, con lo
que, aunque la calidad técnica no sea la idónea, podemos hacernos una idea de
cómo era la voz de este singular cantante.
El volumen contiene 165
históricas fotografías, que fueron mostradas en una exposición dedicada al
tenor en Zaragoza entre mayo y octubre de 2018. Se añaden informaciones sobre
el repertorio, las grabaciones y hasta los cachés cobrados por el tenor
oscense. J.P.M.
No hay comentarios:
Publicar un comentario