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domingo, 9 de junio de 2019

Una ópera cósmica.


Tomás Marco. Selene. Ana Otxoa, soprano. Lucía Gómez, mezzosoprano. Íñigo Vilas, tenor. Jacoba Fradrique, barítono.  Neri Hualde, Pilar Santigosa, Lorenzo Beteta, Fernando de Luis, Marcelo Bellagamba y David Azurza, voces. Musikene Sinfonietta. Púlsar, Orquesta Filarmónica de Poznan. Director: José Luis Temes. Cezanne CZ053. CD.


Puede decirse que Tomás Marco (Madrid, 1942), es un compositor muy interesado por el teatro lírico, al que ha dado ya varios títulos: Ojos verdes de luna, El viaje circular, Segismundo, El caballero de la Triste Figura …  Selene, ..ópera en un acto, fue escrita entre 1967 y 1973 respondiendo a un encargo . de la Fundación Juan March. Se estrenó en el Teatro de la Zarzuela,  en 1974, con dirección escénica de Rafael Pérez Sierra y musical de Odón Alonso e interpretación de María Orán, Ana Ricci, Julián Molina y Antonio Blancas. Fue repuesta en 1996 (con José Carlos Plaza y Cristóbal Halffter, como responsables directos), y llega ahora al disco, en lo que es su primera grabación mundial, de la mano de José Luis Temes.

Se trata de una obra atípica, vanguardista y original, que presenta algunas curiosidades. No tiene texto cantado propiamente dicho, sino que la intervención de los cantantes (dos mujeres y dos hombres), se apoya en vocalizaciones y melismas. Los textos hablados, que de alguna manera ofrecen el “argumento”, están encomendados las voces de unos actores. Además, estos textos pueden ser alterados, incluso sustituidos, en cada interpretación (en la actual se usan pasajes precolombinos, en castellano, en euskera, incluso grabaciones de las palabras pronunciadas por los astronautas que pisaron el suelo lunar en 1969). Estamos ante una completa aleatoriedad que, sin embargo, no afecta a la música. Los personajes protagonistas (Selene, la Luna; Gea, la Tierra y dos humanos) tienen, a mi juicio, una dificultad añadida a las habituales: la de definir y plasmar la “expresividad” de lo que cantan sin que haya palabras que por su propia naturaleza sonora o significado les ayuden.

A pesar de su indudable innovación o modernidad, es música de agradable –y diría que agradecida– escucha, en la que el oyente encuentra una excelente compañía para la contemplación de la profundidad e inmensidad inalcanzable del cosmos. Música sosegada, tranquila, apacible, serena.

Un momento de la presentación del disco.
 El conjunto instrumental requiere una orquesta media, con mucha percusión, un cuarteto de saxofones y medios electrónicos controlados por ordenador, que proporcionan a las voces habladas una profundidad y una presencia notable y atractivas. Selene merece escucharse con atención. Es obra de ambiente “cósmico”, al menos en el sentido a que nos ha acostumbrado el cine.

La interpretación muestra el cuidado con que Temes plantea estas obras “difíciles”. Como experto en estas músicas actuales (la creación contemporánea española estará en deuda permanente con él), sabe recrear estas partituras con solvencia y autoridad. El conjunto Musikene Sinfonietta responde acertadamente y los solistas, pese a las dificultades apuntadas, dan fuerza a sus intervenciones. El coro utilizado en la versión primigenia ha sido sustituido en esta grabación por dos sintetizadores de voz, uno para las masculinas y otro para las femeninas; el resultado se integra perfectamente en la producción.

La grabación suena muy bien, Javier Monteverde, como ingeniero de sonido, merece felicitaciones.

El Cd se completa con la obra, Púlsar, de 1986 que Marco dedicó a Temes, y se inspira en esos cuerpos celestes que emiten radiaciones electromagnéticas muy intensas a  intervalos regulares. Musicalmente son tres fragmentos en los que el ritmo, el pulso, es determinante.

Este CD, que coincide con el 50 aniversario de la llegada del hombre a la Luna, es producto del gran tesón de Temes, quien, a pesar de las dificultades de estos tiempos, sigue mostrando un enorme y contagioso entusiasmo por la música española.

José Prieto Marugán

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