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domingo, 6 de octubre de 2024

Un recuerdo al Maestro Alonso.

 

Fragmentos de La Calesera, Curro el de Lora, La zapaterita, Doña Mariquita de mi corazón, Aquella noche azul, Luna de miel en El Cairo, Me llaman la presumida y Maitechu mía. Carmen Mateo, soprano. Marcelo Solís, barítono. Atlantida Chamber Orchesta & Choir. Director: Manuel Tevar. Sala de Cámara del Auditorio Nacional de Música, Madrid, 5 de octubre de 2024.

Como adelanto al hecho de que en el año próximo se cumplirá el primer centenario de los estrenos de dos grandes zarzuelas del compositor granadino Francisco Alonso, hemos tenido ocasión de escuchar fragmentos muy representativos de La Calesera y Curro el de Lora, que ocuparon la primera parte este recital. La conocida “Romanza de Rafael” y otros números de la primera de las obras citadas, dio paso a sendos números de su gran zarzuela Curro el de Lora: ese Curro el de Lora que quiso convertir en ópera, ese Curro que consideraba su mejor trabajo y ese Curro que es un desconocido si hablamos de representaciones teatrales. Es cierto que hay una grabación, realizada en 2007, bajo la dirección de Juan de Udaeta, con la Orquesta y Coro de RTVE, además de un magnífico plantel de solistas, pero Curro el de Lora espera una recuperación escénica, porque es una gran página de nuestra literatura lírica que no merece estar fuera del repertorio.

La segunda parte nos ofreció números musicales de un Alonso más moderno, de otras producciones de su pluma más cercanas a lo que se ha llamado “modernidad” que se traduce en el empleo de formas americanas: el foxtrot, el swing … Hay que ver la habilidad del granadino para pasar de un chotis castizo a un pasodoble garboso, en la misma pieza. Sorprende la versatilidad de sus composiciones más ligeras, frente a la seriedad y la grandeza de un Curro.

El recital terminó con la impresionante y apasionada canción Maitechu mía, escrita en San Sebastián de un tirón, algunos quizá dirían hoy que “en directo”; página que ha sido cantada por las más grandes voces, y por conjuntos musicales que practican géneros diferente al lírico.

Fueron protagonistas la soprano alicantina Carmen Mateo, de voz no muy grande pero con técnica suficiente para el repertorio que abordaba. Marcelo Solís, fue el solista masculino. Su voz baritonal llenó la sala y cantó con soltura y acierto. Fueron acompañados por una pequeña orquesta de cámara, a las órdenes del director madrileño Manuel Tevar que, a nuestro juicio, ofreció un volumen a veces excesivo para la sala, corriendo el riesgo, en algún momento, de tapar a los cantantes.

El público aplaudió con entusiasmo, y participó en el pasacalle “Por la calle de Alcalá”; de Las Leandras que fue ofrecido como propina. José Prieto Marugán.

miércoles, 2 de octubre de 2024

Ópera. Marina.

 


Ópera en tres actos. Libreto de Francisco Camprodón y Miguel Ramos Carrión. Música de Emilio Arrieta. Estreno: 16 de marzo de 1871, en el Teatro Real, de Madrid. Acción en Lloret de Mar (Gerona), mediados del siglo XIX  

 Personajes e intérpretes del estreno.

Marina (Angiolina Ortolani). Jorge (Enrico Tamberlik). Roque (Gottardo Aldighieri), (Pacual (Luigi Gassier).

 Números musicales destacados. Acto I. Coro de pescadores (“Ya la estrella precursora”). Barcarola de Marina. Marina y coro (“Brilla el mar”). Aria de Marina (“¡Cómo crecen los latidos!”). Dúo de Marina y Pascual (“¡Niégame que es tu amante!”). Coro de pescadores (“Jorge dio fondo”). Aria de Jorge (“Costa la de Levante”). Cuarteto. Marina, Jorge, Roque y Pascual (“Seca tus lágrimas”). Acto II. Preludio y coro (“Ánimo todos”). Dúo de Marina y Roque (“Magnífico buque”) Final II, bailable y concertante (“¡Ve, ya la gente viene hacia acá!”). Acto III.  Preludio. Introducción, coro y brindis (“Hasta el borde las copas llenad”). Terceto y escena. Marina, Jorge y Roque (“Quedo, quedito…”). Tango de Roque y coro (“Dichoso aquel que tiene la casa a flote”). Dúo de Marina y Jorge (“Por Dios, tu pena cese”). Final III (“¡Ay, desgraciado!”).

Argumento. Acto I. Marina espera la llegada de Jorge del que está enamorada. Mientras este llega, el capitán Alberto viene a despedirse de Marina antes de volver a embarcar. A requerimiento de Marina, Alberto promete entregarla una carta que su padre dejó al morir. Pascual, tosco propietario del astillero, se declara a Marina, y esta intenta averiguar si Jorge la corresponde. Como ambos se han criado juntos y no tienen más familia, debe ser quien conceda a Pascual su mano, si este la pide. Así ocurre. Jorge, enamorado también en secreto de Marina, despechado acepta porque, dice, él va a casarse con otra mujer.  Roque, desengañado, se da cuenta de que Marina no es sincera y presiente que vendrán tiempos difíciles.

Acto II. En su astillero, Pascual anuncia su boda con Marina. Todos advierten la infelicidad de la mujer y durante el subsiguiente festejo Roque cuenta a Marina que Jorge no se va a casar. Esta situación pone en evidencia los sentimientos encontrados de los personajes: el entusiasmo de Pascual, el desamor de Jorge y Marina y la amarga ironía de Roque.

Acto III. En una taberna, Jorge y Roque beben con otros marineros hasta emborracharse. Así los encuentra Marina que habla con Jorge de la mujer que le ha defraudado. Ella piensa que se trata de otra e intenta averiguar de quién se trata, pero nada consigue. Pasqual encuentra a un marinero que trate la carta prometida por Alberto. Pascual hace salir a Marina y, movido por los celos, rompe su compromiso con la muchacha. A partir de ahora, Jorge y Marina pueden declararse su amor mutuo.

Comentario. Aunque la obra nació como zarzuela, es su versión como ópera la que suele ofrecerse normalmente. Su transformación fue aconsejado al autor por, entre otros, el cantante Enrico Tamberlik. Como Camprodón había fallecido, Arrieta encargó la revisión del texto a Ramos Carrión quien respetó bastante el trabajo de  su predecesor. Marina, como ópera, se estrenó en el Teatro Real (llamado entonces Gran Teatro Nacional de la Ópera),cpnt en un “beneficio” a Tamberlik, que cantó la parte de Jorge, con la Ortalina en el papel de Marina, el  barítono francés Gassier en el de Roque y Aldighieri en el de Pascual. La flamante ópera obtuvo un éxito clamoroso que constituyó el acontecimiento de la temporada, representándose seguidamente en todos los teatros líricos de Europa y América hispana y conservando hasta hoy todo el fulgor de una música espontánea, escrita con buen oficio y elegancia melódica. 

Sobre los cambios musicales escribe Peña y Goñi: "La obra tenía dos actos, se agregó uno más y Arrieta escribió, además de las escenas y recitados consiguientes, dos dúos, uno para tiple y bajo y otro para tenor y barítono que se intercalaron en el primer acto; preludio, coro de introducción, concertante y romanza de tiple y dúo de tiple y barítono para el acto segundo que resultó completamente nuevo y, por fin, un dúo para tiple y tenor y un rondó final con que terminó la ópera. El acto segundo de la zarzuela entró íntegro en el tercero de la refundición".

Esta obra, que muchos han calificado de “italiana”, con cierta intención despreciativa, ofrece numerosos momentos musicales de interés, desde el “Coro de pescadores” con que comienza. No vamos a citarlos todos, pero merece la pena escucharse con atención la Barcarola (“Brilla el mar engalanado”), la vibrante Romanza de la protagonista (“Pensar en él”), el Dúo de Pascual y Marina (“Niégame que es tu amante”), la impetuosa Salida de Jorge (“Costas las de Levante”), el Dúo que mantiene con Pascual (“Pascual, amigos míos”), o su encendido canto acompañado por los pescadores (“Al ver, en la inmensa llanura del mar”); todos ellos en el primer acto. En el segundo, el Coro de marineros (“Ánimo todo, fuera pereza”), y el concertante final. En el último acto, el vibrante Brindis (“Hasta el borde la copa llenemos”) que tantas veces hemos oído dentro y fuera de los escenarios teatrales; las seguidillas de Roque (“La luz abrasadora”) y el muy conocido “Tango” de este mismo personaje (“Dichoso aquél que tiene”).

La versión que ahora se ofrece es responsabilidad de Bárbara Lluch, directora de escena barcelonesa, que ve en los personajes de la obra “el miedo al rechazo, al abandono, la inseguridad, los celos, los complejos, la incertidumbre”, es decir las emociones que “complican nuestras relaciones amorosas continuamente y que tanto daño nos hacen”. José Prieto Marugán.

MARINA

Ópera en tres actos

10 funciones (9 al 20 de octubre de 2014)

Nueva producción del Teatro de la Zarzuela

 

Intérpretes:

Sabina Puértolas * / Marina Monzó ** (Marina., huérfana)

Graciela Moncloa *** (Teresa, amiga de Marina)

Ismael Jordi * / Celso Albero ** (Jorge, capitán)

Juan Jesús Rodríguez * / Pietro Spagnoli ** (Roque, contramaestre).

Rubén Amoretti * / Javier Castañeda ** (Pascual, dueño del astillero).

Ángel Rodríguez * / Rodrigo Álvarez ** (Alberto, capitán)

Juan Sousa *** (Un marinero) Capitán).

Una voz *** (Román Fernández-Cañadas)

 

Equipo artístico.

Dirección de escena: Bárbara Lluch.

Escenografía: Daniel Bianco.

Vestuario: Clara Peluffo Valentini.

Iluminación: Albert Faura.

Movimiento escénico: Mercé Grané

Diseño de Videoproyecciones: Pedro Chamizo.

 

Coro Titular del Teatro de la Zarzuela (Dtor. Antonio Fauró).

Rondalla Lírica de Madrid “Manuel Gil” (Dtor. Antonio Ortega).

Orquesta de la Comunidad de Madrid.

Dirección musical: José Miguel Pérez-Sierra.

 

*  - 9, 11, 13, 17 y 19 de octubre de 2024.

** - 10, 12, 16, 18 y 20 de octubre de 2024.

*** - Miembros del Coro Titular del Teatro de la zarzuela.

 

 

viernes, 27 de septiembre de 2024

Homenaje al Maestro Alonso.

El año de 1925 debió ser para el compositor granadino Francisco Alonso, un año algo extraño. En él alcanzó uno de los éxitos más importantes de su carrera con La Calesera y sufrió una decepción con una obra grandiosa salida de su pluma: Curro el de Lora.

Para celebrar el próximo centenario de ambas zarzuelas, Atlántida Chamber Orchesta ofrecerá el día 5 de octubre, a las 19 horas, en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional, de Madrid, un concierto en cuya primera parte se podrá escuchar una selección de los mejores fragmentos de estas dos zarzuelas.

Curro el de Lora se estrenó en Apolo el 29 de octubre de 1925, teniendo como protagonistas a Selica Pérez Carpio, soprano, Eugenia Galindo, tiple cómica, y el barítono José Marín. Cuenta la historia de un bandolero que encuentra, por casualidad, a su antiguo amor. Parece que la relación no es recuperable. Curro es traicionado por uno de sus compinches y queda mal herido; Lola, su antiguo amor, al verle desamparado siente renacer sus antiguos sentimientos y terminará en sus brazos. La obra, muy notable, no alcanzó el éxito merecido. Quizá el público de Apolo no era el más adecuado para un trabajo como éste, un trabajo que el maestro Alonso siempre considero como el mejor entre los suyos y que llegó a pensar a convertirlo en ópera. Es una obra que debería ser ofrecida escénicamente por su espectacularidad.

La Calesera se estrenó en la Zarzuela el 12 de diciembre del propio 1925. Narra una historia de amor, ambientada en el Madrid romántico en la que intervienen una cómica y una marquesita  que aman a un liberal. En ella figura, además, el famoso bandolero Luis Candelas. La Calesera tuvo un éxito rotundo, tanto que el maestro Alonso, al terminad la función a las 2 de la madrugada, fue llevado en hombros desde el teatro hasta su casa, en la calle del Prado.

La segunda parte del concierto la forman páginas de otras importantes zarzuelas de Alonso: La zapaterita, La parranda, Doña Mariquita de mi corazón, Aquella noche azul, Luna de miel en El Cairo y Me llaman la presumida. Junto a ellos, la célebre canción Maitechu Mía.

Intervienen la soprano alicantina Carmen Mateo y el barítono malagueño Marcelo Solís. Dirigirá la Atlántida Chamber Orchestra su fundador y director, el pianista y compositor madrileño Manuel Tévar. José Prieto Marugán.

 


 

 

miércoles, 25 de septiembre de 2024

Domitila. Amores imposibles.

 


Domitila.
Ópera de cámara con texto y música de João Guilherme Ripper. Ana Quintans, soprano. Irene Martínez Navarro, clarinete. Esteban Jiménez, violonchelo. Borja Mariño, piano y dirección musical. Nicola Beller Carbone, dirección de escena. Carmen Castañón, escenografía. Pier Paolo Álvaro y Roger Portal, vestuario. Pedro Chamizo, Iluminación. Madrid, Fundación March, 24 de septiembre de 2024.

El compositor brasileño João Guilherme Ripper compuso su ópera Domitila, basándose en la correspondencia entre el emperador Pedro I de Brasil y la Marquesa de Santos. El estreno tuvo lugar en el año 2000, en Rio de Janeiro, y hemos tenido ocasión de conocerla en el auditorio de la Fundación Juan March, dentro del ciclo Teatro Musical de Cámara que, desde hace diez años, viene ofreciendo en colaboración con el Teatro de la Zarzuela.

Se trata de un monólogo construido a partir de textos seleccionados de las cartas cruzadas entre ambos personajes históricos, acompañado por un pequeño conjunto instrumental. La ópera es interesante, aunque sólo sea por lo infrecuente de su estructura: una única intérprete canta  dando vida a un hombre y a una mujer. Esto añade a su papel dificultades adicionales. Ana Quintans, soprano lisboeta, fue capaz de solventar todas las dificultades. Tiene una voz poderosa y de amplio registro tanto en el registro grave como en el agudo. En Domitila está prácticamente todo el tiempo en escena, lo que añade a su interpretación una especial dificultad. Fue acompañada por sólo tres instrumentos cuyos intérpretes intervienen también en el desarrollo escénico. Este cuarteto se desenvuelve en un espectáculo ideado por la soprano alemana Nicola Beller Carbone, que con este montaje da sus primeros pasos como directora de escena.

La función a la que asistimos fue una de las dedicadas a escolares de segunda enseñanza que ofrece la Fundación Juan March en este tipo de espectáculos. Nos interesan estas funciones para ver no sólo el espectáculo ofrecido, sino la reacción de un público que, en su inmensa mayoría, no asiste a funciones líricas, ni de ópera, ni de zarzuela. He de señalar el buen comportamiento de un teatro lleno de jóvenes, escuchando una música que no es la suya y que se mantuvo interesado y en silencio durante toda la representación. Supongo que antes de asistir hay un trabajo previo en sus centros escolares donde les “preparan”. La verdad es que este tipo de espectáculos me parecen muy interesantes, porque enfrentan a un público desconocedor con obras antiguas o modernas pero sin concesiones a quienes son “novatos” en esto de la afición lírica.

Después de la función hubo un pequeño coloquio con los jóvenes en el que escuchamos preguntas muy interesantes, probatorias de que la experiencia les llamó la atención.

José Prieto Marugán.


 

domingo, 22 de septiembre de 2024

El teatro lírico español en la pianola.

 

A  Esther Burgos Bordonau y Antonio Carpallo Bautista,

de la Universidad Complutense de Madrid,

que me descubrieron el apasionante mundo de la pianola.

 

 


Desde sus más elementales orígenes (una cuerda que vibra entre dos puntos, una columna de aire dentro de un tubo, o cualquier objeto que es golpeado), la evolución de los instrumentos musicales es apasionante. Durante siglos, el hombre, ha ido seleccionando materiales, añadiendo elementos y perfeccionando mecanismos para conseguir mejorar estos objetos con los que hacer música. Quizá sea el piano uno de los instrumentos más desarrollados y evolucionados, casi el único al que se ha dotado de mecanismos para hacerlo sonar sin necesidad de tener la habilidad que proporcionan años de complejo y concienzudo estudio y práctica.Uno de estos instrumentos es la pianola, término que nació como una marca comercial, pero que ha dado origen a un instrumento en auge en España en las tres primeras décadas del pasado siglo XX.

¿Qué es una pianola?

Nuestro Diccionario de la Lengua Española ofrece estas dos definiciones: “Piano que puede tocarse mecánicamente por pedales o por medio de corriente eléctrica” y “Aparato que se une al piano y sirve para ejecutar mecánicamente las piezas preparadas al objeto”. Como en tantas ocasiones, las definiciones son poco ajustadas. Más correcta, aunque no totalmente exacta, es la descripción ofrecida por la Wikipedia: “Es un instrumento musical con el mecanismo del piano al que se agregan elementos mecánicos y neumáticos para permitir la reproducción automática de la música perforada en un rollo de papel”.

Como otros instrumentos, la pianola ha ido avanzando desde su invención a finales del siglo XIX. Poco a poco al instrumento inicial se le fueron añadiendo sistemas y mecanismos que permiten al “pianolista” (término no registrado en el DRAE[1]), una cierta capacidad de interacción con la música que interpreta, afectando, básicamente, a la velocidad y a la intensidad del sonido.

Los rollos de pianola.

El rollo de pianola es el elemento fundamental de este instrumento. Inicialmente se fabricaron a mano, realizando los agujeros equivalentes a cada nota de la partitura en el lugar adecuado del papel, correspondiente a la tecla apropiada del piano, y con una longitud según la duración de cada nota. Más tarde se añadió al instrumento un mecanismo formado por unas varillas, correspondientes a cada tecla del piano, que se activaban mediante el teclado, de manera que grababan una huella sobre un papel carbón. Este papel era la guía para realizar los agujeros en otro papel, ya definitivo, que sería el rollo para la interpretación. De esta manera quedaban registrados la altura y la duración de los distintos sonidos. Gracias a esta técnica se pudieron registrar los llamados “rollos de artista”, que guardaban las interpretaciones realizadas por grandes pianistas e incluso compositores vivos de principios del siglo XX. Sobra decir que los primeros procedimientos, totalmente artesanales, pasaron a ser mecanizados, mejorando los sistemas de producción industrial.

Imagen de un rollo de pianola

El mecanismo de la pianola consiste en un generador de aire (fuelles o motores) que se dirige a un elemento llamado “flauta de pan”. Según va avanzando el rollo, que  se va enrollando en otro cilindro, el aire atraviesa los agujeros y se ponen en marcha una serie de palancas y engranajes que hacen que se activen las teclas que corresponden al agujero, durante el tiempo que marca su longitud.  Este sistema propició la fabricación de “partituras” musicales capaces de ser reproducidas por personas sin la preparación profesional de un pianista.

Durante la vida de la pianola, existieron distintos tipos de rollos, según el número de notas que podían alcanzar, hasta que, en 1908, se generalizaron los de 88 notas, equivalentes a la extensión de un piano normal. También está más o menos generalizado el ancho del rollo: entre 29 y 32 cms; la longitud depende de la duración de la pieza grabada.

Los rollos fueron desarrollando, además, elementos adicionales que permitían la interacción del pianolista durante la ejecución. No era un simple “piano mecánico”. Tales sistemas fueron patentados con los nombres de metrostyle y themodist. El primero servía para controlar la velocidad durante la ejecución de la pieza, a pesar de que todos los rollos llevaban una indicación inicial del tempo y en algún caso de expresión. El themodist permitía intervenir en la dinámica, es decir la potencia del sonido correspondiente a cada una de las dos manos. En el caso de los rollos de música vocal, se llegó a añadir el texto cantado y fueron llamados “rollos cantores”.

Además de los “rollos de artista”, existieron rollos de acompañamiento, en los que la parte solista podía ejecutarse con violín, violonchelo o canto.

Los rollos llevan unas indicaciones numéricas que determinan la velocidad de paso del papel (en pies por minuto) y que se relacionan con los “tempos” musicales tradicionales

La digitalización del sonido de los rollos de pianola, nos permite conocer, a pesar de toda la subjetividad que conlleva, cómo se traspasaban las partituras a los rollos y, en consecuencia, cómo sonaban estos. 

Algunas características curiosas:

·         Las notas largas y tenidas, a veces se sustituyen con rápidos trinos.

·         Suele haber muchas notas de adorno.

·         En ocasiones, la escucha nos parece “mecánica” o “machacona”, sobre todo en los acompañamientos, pero siempre es agradable.

Los arreglos.

Desconocemos los nombres de quienes hicieron el traspaso de las músicas destinada a la pianola, al papel perforado. Pero como disponemos de la enorme suerte de poder escuchar muchos de ellos[2], podemos encontrar algunos detalles que suponemos “añadidos” o “ajustados” a la naturaleza del rollo, para complementar aspectos que puede hacer un pianista humano, según su propia concepción de la partitura y sus cualidades técnicas. No olvidemos que un pianolista puede intervenir en ciertos aspectos de la ejecución musical como el control de la velocidad y la dinámica del sonido.

En algunos casos, quizá los arreglos fueran de los propios compositores;en otros de músicos con mucho oficio, especializados en realizar estas transcripciones. Quizá incluso, al principio, fueran los trabajadores de las fábricas.

Concierto de pianola y orquesta.
 La pianola en España.

Las primeras pianolas llegaron a nuestro país en 1896, y muy pronto aparecieron empresas que comenzaron a producir rollos con música internacional y, sobre todo de zarzuela y música española. Entre los fabricantes españoles figuran las marcas: España Musical (Zaragoza); Rollos Princesa, E.R.A. Rollos Musicales Victoria[3], y  Best (Barcelona);  Minerva y Diana (Madrid); Rollos Artísticos Ideal (San Sebastián), activos en distintos períodos, entre 1923 y 1936,

La pianola en España se difundió cn rapidez. Los alquileres y las ventas de instrumentos fueron importantes[4], aumentando la popularidad del instrumento. Como detalle curioso podemos citar el concierto para pianola y orquesta que se celebró en el Teatro de la Princesa el 5 de junio de 1906, a cargo del pianolista Vicente Toledo (director artístico de la casa Aeolian), y una orquesta de 45 profesores, bajo la dirección de Arturo Saco del Valle[5]. Se interpretaron obras de Mozart, Rubinstein, Mendelssohn, MacDowell, Grieg y Liszt.

Este instrumento conquistó lugares públicos (cines, cafés, establecimientos hoteleros…) y domicilios privados. Era una manera de interpretar música sin ser profesionales. En España, la casa Hazen se convirtió en promotor y proveedor de pianolas con políticas modernas y una visión muy comercial del negocio.

Actualmente se conservan muchos rollos que están siendo inventariados, restaurados y, lo que es más importante, convertidos en ficheros de audio que permiten comprobar cómo sonaba este tipo de reproducciones musicales. La Biblioteca Nacional de España conserva unos 7.000 rollos[6]; algo más de la mitad pueden ser escuchados a través de la Biblioteca Digital Hispana (Véase bibliografía).

Fábrica de rollos de pianola

 

Música para pianola. Repertorio general.

Quienes accedan por primera vez a uno de los catálogos disponibles de música para pianola, quizá se vean sorprendidos por la enorme variedad de música que contiene. Música de todo tipo: de baile, fragmentos de ópera, opereta y zarzuela, música instrumental, especialmente de piano, y transcripciones de partituras sinfónicas y de cámara, sin que falten canciones populares. Músicas que nos dan idea de lo que era más popular en los años de expansión del instrumento, que tuvo lugar entre 1910 y 1930. La música de la sociedad de aquellos años.

El teatro lírico español.

Para elaborar este trabajo hemos consultado una serie de catálogos[7] pertenecientes a distintas marcas. Realizada la selección de la música teatral española, ópera, operetas y las recogidas bajo la amplia y ambigua identificación de zarzuela, hemos manejado unos 2400 registros pertenecientes al teatro lírico español[8].

La datación de los rollos no es fácil por falta de datos originales y por la escasez de información en los catálogos. En el caso de la zarzuela, las identificaciones de los números musicales, no están suficientemente anotadas y, en muchos casos, se han simplificado hasta el límite. Muchos rollos corresponden a fragmentos, más o menos exactos, de las obras reseñadas; para algunas obras, el número de fragmentos trasvasado supone la casi totalidad de la obra.

·     No siempre disponemos de todos los datos: identificación inequívoca, fechas de creación/edición de cada rollo, si es “versión completa” o no, autor de la traslación de la partitura al rollo. Por ejemplo, en algún caso, se confunde el título de un número con una obra musical: el rollo “Chueca y Valverde - ¡Viva España!, seguramente se refiere el pasodoble de la zarzuela Cádiz”.

·     En algunos casos no aparece el autor  o está incompleto (por ejemplo, Rosillo, en lugar de Pérez Rosillo).

·         Las fechas de edición son aproximadas.

·    Algunas obras son hoy absolutamente desconocidas, incluso sólo aparecen en el catálogo de los compositores.

·         Muchas obras eran tan populares que los títulos estaban reducidos al mínimo: Dúo, Final.

·         Algunos de los rollos contienen varios fragmentos.

·   Los catálogos, en ocasiones, se olvidan de algún autor o cambian el orden tradicional de sus identificaciones. Por ejemplo, la zarzuela Cádiz, tanto aparece como de Chueca y Valverde, como de Valverde y Chueca, o simplemente de Chueca. Por cierto en ningún caso se aclara si Valverde fue el padre o el hijo.

·       La identificación de los autores sólo hace referencia a los músicos, no a los libretistas.

Existen rollos de los mismos fragmentos editados por distintas marcas. Esto puede deberse a:

·       Que se trate de distintas impresiones.

·     Que sean la misma edición aunque comercializada por marcas/empresas diferentes, conforme a posibles acuerdos comerciales.

·       Que se trate de la misma edición destinada a distintos mercados.

Como es fácilmente comprensible no reseñamos todas las referencias encontradas; su elevado número haría inviable la lectura de esta aproximación.

En España tenemos la costumbre de llamar “zarzuela” a casi todas las obras líricas escritas para el teatro, aunque, en realidad, se manejan un buen número de “géneros” y subgéneros[9]. Nosotros hemos separado las referencias encontradas en tres modelos: Ópera (todo el texto es cantado), opereta (textos cantados y hablados siguiendo modelos franceses y alemanes) y zarzuela, resto de obras. 

Portada del catálogo Victoria
 Óperas.

Los catálogos utilizados ofrecen, como no podía ser menos, rollos con fragmentos destacados de las grandes óperas del repertorio internacional. Aquí prescindimos de su reseña por la naturaleza propia de este trabajo y aunque, la producción musical española en este género es escasa, sí citaremos la existencia de rollos de óperas escritas por autores hispanos. Salvo error u omisión se grabaron fragmentos de:

Amadeo Vives -  Balada de carnaval (Best, Victoria).

Ángel Barrios y Conrado del Campo – El Avapiés (Best, Victoria).

Emilio Arrieta, Marina (Aeolian, Best, Diana, España musical, Oriental, Princesa, Victoria).

Enrique Granados – Goyescas (Aeolian, Victoria).

Ernesto Pérez Rosillo – La rubia del Far West (Oriental, Princesa, Victoria).

Jesús Guridi – Amaya (Victoria).

José María Usandizaga – La llama (Diana, España musical).

Rafael Millán – Glorias del pueblo (Princesa).

Tomás Bretón – Garín (Best, España musical, Princesa, Victoria), La Dolores (Aeolian, Best, Diana, España musical, Oriental, Princesa, Victoria), Los amantes de Teruel (España musical).

Operetas.

En este género los rollos disponibles abordan dos tipos de obras: las operetas escritas por compositores nacionales y las creadas fuera de nuestras fronteras, se representaron en teatros españoles, con música original y/o arreglos musicales de compositores españoles.  Por el ámbito que abordan estas líneas sólo citaremos las operetas compuestas, enteramente, por autores nacionales. Hemos encontrado las siguientes:

Amadeo Vives –  La generala (Best, Oriental, Princesa, Victoria).

Jacinto Guerrero – La reina de las praderas (Princesa, Victoria), El collar de Afrodita (Oriental, Victoria).

Manuel Penella – La niña de los besos (España musical), Las romanas peligrosas (España musical).

Pablo Luna –  Benamor (Oriental, Princesa, Victoria), La mecanógrafa (España musical), Los calabreses (Best, Diana, España musical, Victoria), Molinos de viento (Best, España musical, Oriental, Princesa, Victoria).

Pablo Sorozábal – Katiuska (Victoria).

Rafael Millán – El bello Don Diego (Victoria), El elefante blanco (Best, España musical, Victoria), El príncipe bohemio (Best, España musical, Victoria), Las alegres chicas de Berlín (España musical).

Ruperto Chapí – La czarina (Best, España musical, Princesa, Victoria).

Vicente Lleó –  La corte de Faraón (Best, España musical, Victoria), La república del amor (España musical).

Zarzuelas.

Dentro de los rollos de zarzuela distinguimos varias modalidades. Los que llamamos “originales” que responden, con más o menos rigor, a los números musicales que anuncian y otros conjuntos que se anuncian como fantasías, selecciones, transcripciones, etc., que nos llevan a pensar en elaboraciones a partir del modelo original.

Rollos originales.

Consideramos “rollos originales” aquellos que, al menos aparentemente, se corresponden con los números musicales de la partitura, aunque hay que hacer constar que, en muchos casos, se han acoplado (en un único rollo) dos o más de estos números, incluso alterando el orden original de los fragmentos.

La cantidad de rollos de este tipo es muy grande, algo más de 1500 ejemplares, por lo que se comprenderá que no podemos registrarlos todos. Nos limitaremos a transcribir un “ranking” con los autores más grabados y sus obras.

Hemos de señalar que en algunos casos podría decirse que se trasvasó al rollo, prácticamente toda la zarzuela, aunque no hayamos contrastado con los materiales correspondientes este extremo. Podía ser el caso, por ejemplo, de El barberillo de Lavapiés, La verbena de la Paloma o El caserío.

Publicidad de la pianola en prensa

 

Salvo despiste por nuestra parte, estos son los autores con diez o más de sus obras llevadas a la pianola.

Jacinto Guerrero (30): Campanela, Cándido Tenorio, Colilla IV, Cómo se hace un hombre, Don Quintín el amargao, El collar de Afrodita, El huésped del Sevillano, El número 15, El país de los tontos, El rey nuevo, El sobre verde, La alsaciana. La luz de bengala, La montería, La orgía dorada, La reina de las praderas, La rosa del azafrán, La sombra del Pilar, Las alondras, Las mujeres de Lacuesta, Las tentaciones, Lo que va de ayer a hoy, Los bullangueros, Los faroles, Los Gavilanes, María Sol, Martierra, Por los flecos del mantón, Teodoro y Cía., y La orgía dorada,

Ruperto Chapí (18): Curro Vargas, El amor en solfa, El capote de paseo,  El dos de mayo, El estudiante, El puñao de rosas, El tambor de granaderos, La alegría de la huerta, La bruja, La caza del oso, La czarina, La revoltosa, La tempestad, La venta de Don Quijote, Las hijas del Zebedeo, Mujer y reina, Pepe Gallardo, y Quo Vadis.

Gerónimo Giménez (17): Cinematógrafo nacional, De vuelta al vivero, El amigo del alma, El baile de Luis Alonso, El barbero de Sevilla, El infierno, Enseñanza libre, La boda de Luis Alonso, La embajadora, La Gatita Blanca, La torre del oro, Las mujeres, Los borrachos, Los pícaros celos, Los voluntarios, Mazantini, y Soleares,

Federico Chueca[10] (16): Agua, azucarillos y aguardiente, Agua y cuernos, Cádiz, Caramelo, De Madrid a París, El año pasado por agua, El arca de Noé, El chaleco blanco, El dos de mayo. La alegría de la huerta, La caza del oso, La corría de toros, La Gran Vía, Las mocitas el barrio, Las zapatillas, y Los arrastraos

Pablo Luna (16): Benamor, Dios salve al rey, El asombro de Damasco, El niño judío, La mecanógrafa

La moza de campanillas, La mujer artificial, Los cadetes de la Reina, Los calabreses, Los dragones de París, Los ojos con que me miras, Los pápiros, Molinos de viento, Pancho Virondo, Rosa de fuego, y Roxana.

Amadeo Vives (14): Bohemios, Don Lucas del cigarral, Doña Francisquita, El duquesito, El escalo, El señor Pandolfo, El tesoro, Juegos malabares, La generala, Los flamencos, Maruxa, Pepe Conde, Trianerías, y Doloretes

Rafael Calleja (13): El as, El cine de Embajadores, El iluso Cañizares, El poeta de la vida, El ratón, Emigrantes, La araña azul, La flor del barrio, Las bribonas, Los borrachos, Los novios de las chacha,  Ninfas y sátiros, y Venus Kursaal[11].

Rafael Millán (13): Blanco y negro, El bello Don Diego, El dictador, El elefante blanco, El pájaro azul, El príncipe bohemio, La dogaresa, La gaviota, La severa, Las alegres chicas de Berlín, Las uñas del gato, Los buscadores de oro, y Nuevo mundo.

Miguel Nieto (13): Certamen nacional, Comediantes y toreros, Cuadros disolventes, El ángel de la guardia, El gaitero, El tesoro de la bruja, La feria de San Lorenzo, La maja, La tela de araña, La tienta, Las españolas, Los inútiles, y Monomanía musical.

Joaquín Valverde[12] (13): Cantos de España, El príncipe Carnaval, La galerna, El iluso Cañizares. A ver si cuidas de Amelia, La tierra de Carmen, El amigo Melquiades, El perro chico, El pollo Tejada. La reja de la Dolores, La suerte loca, San Juan de Luz, y El príncipe Carnaval.

Manuel Fernández Caballero (12): Aires nacionales, Château Margaux, El cabo primero, El dúo de La Africana, El padrino de El Nené, El salto del pasiego, El señor Joaquín, España, Gigantes y cabezudos, La viejecita, Las nueve de la noche, y Los sobrinos del Capitán Grant.

Vicente Lleó (10): Ave César, El método Gorritz , La alegre trompetería, La corte de Faraón, La fea del olé, La república del Amor, La taza de té, Los hombres alegres, Ninfas y sátiros, y Venus Kursaal.

Como se desprende de estos datos, son muchas las obras hoy totalmente desconocidas.

Fantasías, motivos, popurrís, selecciones y transcripciones.

En los rollos que contienen “fantasías” debemos entender que su contenido no es exactamente la música original de cada tema. Este tipo de rollo es numeroso. Disponemos de rollos de las siguientes zarzuelas: Barbieri (El barberillo de Lavapiés, Jugar con fuego, Pan y toros); Chapí (Curro Vargas, El rey que rabió, El tambor de granaderos, La bruja, La tempestad); Chueca (El bateo); Chueca y Valverde (La Gran Vía); Fernández Caballero (El dúo de La Africana, Gigantes y cabezudos, La viejecita, Los sobrinos del capitán Grant); Giménez (La tempranica); Luna (El asombro de Damasco); Oudrid (El molinero de Subiza); Vives (Maruxa).

Como en otros tipos de rollo, desconocemos los autores de estas fantasías, pero sí tenemos algunos ejemplos con esta información: Barbieri (Pan y torosGran fantasía de A. Peña y Goñi); Chapí (La brujaGran fantasía, Transcripción de Larregla); Chapí (La tempestadGran fantasía por E. Zabalza o Zabaleta), y Chueca y Valverde (La Gran Vía, Fantasía por Smith)

Motivos.

Existen unos pocos rollos que responden a creaciones nuevas basadas en temas de conocidas zarzuelas. Nos referimos a los rollos “sobre motivos”, que presentan conocidos temas musicales, luego elaborados y desarrollados.

Son pocos los rollos de este tipo basados en temas zarzueleros. Merece la pena registrarlos: Marcha sobre motivos de El elefante Blanco, de Millán: Pasodoble sobre motivos de El puñao de rosas, de Chapí; Pasodoble y valses sobre motivos de La corte de Faraón, de Lleó, y Valses sobre motivos de La casta Susana, de Valverde,

De ninguno de estos rollos conocemos el autor de la transcripción, Pero sí disponemos del registro de un Pasodoble sobre motivos de El niño judío, de Luna, realizado por M. San Miguel.

Popurrís.

Nuestra Academia de la Lengua define la palabra “popurrí” como “Composición musical formada de fragmentos o temas de obras diversas”. Con ese simple título hemos encontrado rollos sobre las zarzuelas de Pablo Luna (El asombro de Damasco, Los cadetes de la reina y Molinos de viento); Foglieti (El capricho de las damas); Chueca y Valverde (La Gran Vía).

Selecciones. 

Suponemos que los rollos anunciados como “selecciones” deben contener los números musicales más conocidos de las zarzuelas y, en algunos casos, es muy probable que fueran enlazados con alguna música  especialmente elaborada para este fin, realizada por los fabricantes del rollo.  Estas “selecciones”, en la mayoría de los casos sin indicaciones de sus contenidos, no podemos detallarlas aquí por razones obvias, pero al menos, citaremos los nombres de los compositores. Son estos: Alonso, Barbieri, Bretón, Chapí, Chueca, Chueca y Valverde, Fernández Caballero, Giménez, Giménez y Vives, Guerrero, López Torregrosa, Luna, Lleó, Millán, Moreno Torroba, Oudrid, Serrano, Sorozábal, Usandizaga, Valverde y Serrano, Valverde y Torregrosa, y Vives

Transcripciones.

Incluimos aquí aquellos rollos en los que aparece el nombre del transcriptor. Entendemos que debieron ser realizados con más libertad que lo que  supone transcribir una partitura al papel perforado. Cabe pensar que estas transcripciones eran especialmente virtuosísticas.

Un tal A.G. del Valle (en algunas ocasiones identificado simplemente como “Del Valle” del que no conocemos detalles biográficos), realizó para las  marcas Victoria y Best, transcripciones de la jota de La bruja (Chapí), las seguidillas y soleares de La verbena de la Paloma (Bretón), la jota de El dúo de La Africana (Fernández Caballero), y una amplia transcripción de Cádiz, de Chueca, en la que se incluyen: sevillanas, caleseras, pasacalle. barcarola, pasodoble, tango flamenco, zapateado. polca de los ingleses, coplas del ciego y la celebrada jota.

Otro arreglista especialmente destacado, del que tampoco tenemos referencias, es un tal Burgués, que realizó el foxtrot de Muñecos de trapo, del maestro Luna para la marca España musical.

Portada del estudio de la colección Hazen

 

Nuevas posibilidades.

Aunque el nuestro no es un trabajo de rigurosa investigación, elaborándolo se nos ha ocurrido que las pesquisas sobre este interesante sistema de reproducción musical, no se agotan con los estudios publicados.

Teniendo presente que se han digitalizado[13] más de 3600 rollos de la BNE, y que es posible escucharlos, ¿por qué no comparar su sonido, con las grabaciones discográficas (antiguas y modernas) incluso videográficas disponibles?

Podrían responderse así preguntas como:

·         ¿Cómo sonaban estos rollos?

·         En caso de rollos de distintas marcas con igual contenido, ¿hay diferencias?

·         ¿Responden los rollos a la partitura original?

·         ¿Cómo son los “rollos de artista?

·     ¿Qué elementos “extraños” o añadidos, se introdujeron a la hora de elaborar fantasías, popurrís, variaciones …

·         ¿Qué diferencias hay entre un rollo de pianola y una grabación discográfica de piano?

Otra línea de investigación es analizar los catálogos con detalle, todo el que sea posible, y tratar de averiguar por qué hay tanto rollo de números musicales pertenecientes a obras hoy desconocidas. ¿Eran populares en su tiempo? ¿Pudo haber razones no musicales para editar un determinado rollo? Quizá pudiera estudiarse el impacto comercial y sociológico de este procedimiento reproductor de música.


Bibliografía.

Catálogos.

Best. Rollos de música de 65 y 88 notas para toda clase de aparatos pianistas y pianos combinados con aparato. Catálogo nº 2. Suplemento nº 1. Suplemento nº 2. Acompañamientos. Imp. Elzeviriana. Barcelona,

Catálogo de Rollos Aeolian de 88 notas del servicio de abonos. The Aeolian Company Madrid, (h. 1928).

Catálogo de Rollos de música de 65 y 88 notas marca Best. Imprenta de Antonio Marzo, Madrid, 1920.

España Musical. Fábrica de rollos de música para aparatos mecánicos y eléctricos y toda clase de perforaciones, Catálogo general de rollos de 88 y 65 notas y sus similares. Zaragoza.

Diana. Rollos de música perforada adaptables a toda clase de aparatos y pianos automáticos de 88 notas. Cano y Álvarez Guerra. Unión Musical Española. Madrid 

Rollos Best, catálogo general, nueva edición con precios reducidos. Tipolitografía Relieves. Fotograbado Viuda de Luis Tasso. Barcelona.).

Rollos de música de 88 notas, con acentuación y autopedal, para toda clase de pianos combinados con aparatos pianista. Princesa, catálogo general (1927).

Rollos musicales Victoria, catálogo general (1929). La Garriga. Barcelona. Joan Baptista Blancafort.

Rollos Victoria, catálogo general, rollos de música de 88 notas con acentuación y autopedal (h.  1919).

 

Bibliografía general.

Burgos Bordonau, Esther y Carpallo Bautista, Antonio. “La colección de rollos de pianola de la familia Fernández Shaw: Un estudio preliminar. En Anuario Musical, nº. 73, enero-diciembre 2018. Barcelona.

Burgos Bordonau, Esther, Carpallo Bautista y Clausó García, Adelina. (Colab. José Prieto Marugán). Los Fernández Shaw y su aportación al teatro lírico. Estudio de su colección de rollos de pianola. Sociedad Española de Musicología. Madrid, 2018.

Burgos Bordonau, Esther, Carpallo Bautista y Piris Garcete, Cynthia Lorena. Los rollos de pianola de la familia Hazen a través de su historia. Estudio de la colección.   Editorial Dykinson. Madrid, 2015.

Burgos Bordonau, Esther, Carpallo Bautista y Clausó García, Adelina. Identificación, estudio y catalogación de la colección de rollos de pianola de la familia Fernández-Shaw”. En conocimientos sin fronteras: colaboración científica e institucional en Documentación e Información. Facultad de Ciencias de la Documentación. Universidad Complutense de Madrid.

Burgos Bordonau, Esther.  “Metodología de la investigación para las colecciones sonoras: los rollos de pianola”.

Burgos Bordonau, Esther. “La colección de rollos de pianola de zarzuela de la Biblioteca Nacional de España: descripción y análisis preliminar. En Actas del IX Congreso Nacional de la Sociedad Española de Musicología del Siglo XXI: nuevos retos, nuevos enfoques. Madrid, SEDEM, 2018, Págs. 1175-1196.

Gallego, Antonio. “Antonio en el “Pianola”, o La cresta de la ola”. En Jacinto Guerrero. De la zarzuela a la revista. Publicaciones y Ediciones SGAE. Madrid, 1995. Págs.127 y ss.

Iglesias de Souza, Luis. El teatro lírico español. Excma. Diputación Provincial de La Coruña, 1994. 4. Vols.

Roquer, Jordi. “La pianola como paradigma de la música de reproducción mecánica”, en Scherzo, Año XXXIV, nº 350, Abril 2019, págs. 78-81.

Roquer, Jordi. “Zarzuelas de papel perforado. Jacinto Guerrero en el mercado de la pianola”. En Jacinto Guerrero. La zarzuela mecánica. Libro de las Jornadas de Zarzuela. Cuenca, 2018. Fundación Jacinto e Inocencio Guerrero. Madrid, 2019. Págs. 56 y ss.

S/A. Museo di strumenti musicali meccanici. Collezione Marino Marini. Ravenna, Italia (S.f.).

 Recursos internet.

-Biblioteca digital Hispana:

https://www.bne.es/es/catalogos/biblioteca-digital-hispanica

-La música de los rollos de pianola inunda la BDH:

https://www.bne.es/es/blog/blog-bne/la-musica-de-los-rollos-de-pianola-inunda-la-bdh

Digitalización discos pizarra y rollos de pianola.

https://ajuntament.barcelona.cat/museumusica/es/blog/discos-de-78-rpm-y-rollos-de-pianola-digitalizados

-Ejecuciones de pianolistas.

Daniel Villalba:

https://www.youtube.com/watch?v=ki8KdAoD9Uc

-Joe Rinaldo. Barras y estrellas en una pianola con percusión añadida.

https://www.youtube.com/watch?v=2lzIC9ru5V0

-Marcha de la zarzuela Cádiz, de Chueca y Valverde:

https://www.youtube.com/watch?v=2IgIsrDbMOA.

 

 



[1] Una de las primeras veces que se referencia este vocablo, es en 1902, en la ejecución de un concierto en el Liceo barcelonés.

[2] Gracias a la digitalización realizada en la gran colección de la BNE.

[3] Empresa creada en 1905, en La Garriga (Barcelona), por Joan Baptista Blancafort, padre del compositor Manuel Blancafort.

[4] Datos interesantes en el libro Los rollos de pianola de la familia Hazen a través de su historia. Estudio de la colección (Véase bibliografía). También son muy interesantes las aportaciones de Jordi Roquer (Véase bibliografía).

[5] Foto: “Un concierto en el Teatro de la Princesa. El pianola Metroestilo”. En El Arte del Teatro, año I, nº 16. Pág. 12. Foto. Alonso. Es curioso que este artículo emplee el artículo “El”, en masculino. Actualmente, la RAE señala el instrumento como femenino.

[6] Dispone, además, de cuatro pianolas, la primera de ellas, marca Sterling, adquirida en 1990.

[7] Referenciados en la bibliografía.

[8] Se incluyen obras, básicamente operetas, cuyas músicas originales fueron escritas por autores extranjeros, pero que fueron adaptadas por autores españoles para ser dadas a conocer en nuestros teatros.

[9] Luis Iglesias de Souza. En su obra El teatro lírico español, ha catalogado más de 370.

[10] En algunas etiquetas aparecen los nombres de Valverde y Chueca: “Terceto de las cigarreras” (de De Madrid a París), en lugar de lo habitual: Chueca y Valverde.

[11] Estas dos últimas obras aparecen en el catálogo de La España musical, tanto en Calleja y Lleó, como en LLeó y Calleja.

[12] Contabilizamos juntos al padre y al hijo

[13] Trabajo realizado por el Departamento de Arte y Musicología de la Universidad Autónoma de Barcelona, con el apoyo de la empresa Telefónica.