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martes, 8 de octubre de 2013

ZARZUELA RECUPERADA: ¡ADIÓS, MÁLAGA LA BELLA!



Me llega una noticia que ha de llenar de alegría a todos cuantos se interesan por la zarzuela: La recuperación de un título estrenado hace 105 años.  El acontecimiento tendrá lugar el próximo  domingo 13 de octubre, en el Teatro Cervantes de Málaga.

Se trata de ¡Adiós, Málaga la bella!, obra cómico-dramática, de costumbres malagueñas, en un acto y tres cuadros, en prosa, escrita por Antonio Sáenz y Sáenz, con música de José Cabas Quiles, ofrecida por vez primera en el  desaparecidoTeatro Vital Aza, de Málaga, el 24 de agosto de 1908.

La iniciativa se debe a la Casa de Melilla en Málaga y la puesta en escena a la Compañía Teatro Lírico Andaluz. Serán sus intérpretes principales: Lourdes Martín (como Milagros), Sonia García (Soledad), Miguel Guardiola (Tío Borrasca), Pablo Prados (Andrés), Guillermo García (El Manchao), Luis Pacetti (El Señó Frasquito), Carlos Alberto (Surrapa), Antonio Garzón (Damián) y Patricio Sánchez (Jabegote). La dirección escénica responsabilidad de Pablo Prados Martín y la musical de Arturo Díez Boscovich.

La zarzuela desarrolla el siguiente esquema argumental. Cuadro I. Una playa malagueña en la que vive el Tío Borrasca, dueño de una sardinera, La Golondrina, con su hija Milagros y Andrés, un huérfano al que recogió cuando era niño. Andrés tiene un hermano, El Manchao, fantasioso y guaperas, acostumbrado a conseguir a las mujeres, que ha puesto los ojos en Milagros, a la que asedia constantemente. 


Al regreso de una de sus salidas, el Tío Borrasca encuentra a su hija nerviosa y consigue averiguar la causa. Poco tiempo después, la muchacha cuenta a Andrés el agobio del que es víctima y Andrés, lleno de amargura, se aleja por la playa.

Milagros, remendando unas redes, es de nuevo acosada por El Manchao. En ese momento aparece Andrés. Los dos hombres se enfrentan, navaja en mano, pero la aparición del Tio Borrasca, impide la tragedia.

Cuadro II. Frasquito comenta el suceso con otros pescadores, pero la aparición de Milagros le interrumpe. Los pescadores continúan preparando sus barcas para salir a la mar.

Cuadro III. Es de noche. El Manchao, arrepentido, espera a su hermano, mientras recuerda su infancia juntos. Las barcas van llegando; todas menos La Golondrina.  Milagros y el Señó Frasquito esperan nerviosos. Al cabo llega la barca pero falta Andrés. Milagros desesperada, grita su nombre y, a lo lejos, responde la voz de este. Por el foro aparece El Manchao con Andrés en los brazos: se hirió al caer de la barca, pero él lo vio y se lanzó al agua para salvarle porque tiene que decirle “una cosa”. La “cosa” es pedirle perdón como también hace con Milagros. Después, abraza a los dos, se despide del Tío Borrasca y de todos diciendo a su hermano que no llore, que se va contento. Y se marcha entonando una despedida que dice asÍ:

“¡¡¡Adiós, Málaga la bella,
tierra donde yo nací,
para todos fuiste madre
y madrastra para mí!!!

Quiero aplaudir la iniciativa de la Casa de Melilla y felicitar a los malagueños por tener la oportunidad de recordar una obra que canta a su propia tierra. No deberíamos olvidar nunca las páginas musicales o literarias que se escribieron como homenaje a la patria patria chica, porque en ellas va siempre el cariño de quienes pisaron esas tierras antes que nosotros. Mi enhorabuena por la recuperación y ojalá cunda el ejemplo.


Vidal Hernando,

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